Octubre/noviembre es un momento ideal para visitar Dubái, una ciudad sinónimo de lujo. Alojarse en el icónico Burj Al Arab, a menudo considerado el único hotel de siete estrellas del mundo, garantiza la opulencia con un servicio de mayordomo privado y unas vistas impresionantes. Para cenar, el panorama culinario es excepcional, con opciones galardonadas con estrellas Michelin como NOBU at Atlantis y At.mosphere, ubicado en el piso 122 del Burj Khalifa, que ofrecen vistas impresionantes y una cocina exquisita.

Ir de compras es imprescindible, ya que The Dubai Mall y Mall of the Emirates cuentan con los principales diseñadores de lujo. Para explorar la impresionante costa, considere la posibilidad de alquilar un yate privado para disfrutar de un tranquilo crucero por el Palm Jumeirah. Te esperan experiencias exclusivas en el desierto, como safaris privados que incluyen recorridos por las dunas y cenas gourmet bajo las estrellas, o una estancia de lujo en Al Maha, un resort en el desierto.

Para relajarse, disfrute de tratamientos de spa de primera clase en Talise Spa en el Burj Al Arab o en The Spa at One&Only Royal Mirage. Un recorrido en helicóptero ofrece una perspectiva única del impresionante horizonte de Dubái, mientras que una visita a la avenida Alserkal revela la vibrante escena artística de la ciudad.

Los amantes del golf pueden disfrutar de campos de primer nivel, como el Emirates Golf Club, y para entretenerse, las actuaciones privadas en la Ópera de Dubái ofrecen noches inolvidables. Ya sea que explore lugares emblemáticos o disfrute de experiencias de primer nivel, Dubái ofrece un viaje incomparable hacia el lujo.